Rosa Cuñat Olmos (Juana Bautista en religión) nació en Chirivella (Valencia) el 12 de octubre de 1845. Cuando tenía 15 años murió su madre y tuvo que atender a las necesidades familiares “sin dejar de sentir vivos deseos de consagrarse a Dios”.
Con dos compañeras más ingresó en un “Beaterio Franciscano” que abandonaron las tres antes de iniciar el noviciado. Muerto su padre, ella y las dos compañeras iniciaron una vida de oración y trabajaban en una fábrica. En la oración y en la calle descubrían la voluntad de Dios, que era que se dedicaran a “la niñez pobre e indigente, a la enseñanza y al catecismo”.
Con otras cuatro amigas inician la vida comunitaria el 6 de enero de 1881. Vistió el hábito de la “Orden de la Santísima Trinidad” el 6 de noviembre de 1885. Profesó por primera vez el 2 de agosto de 1887. Juana Bautista, pues, con las otras cuatro compañeras son las fundadoras del Instituto de la Santísima Trinidad, de la que fue ministra general en distintos periodos.
El 26 de junio de 1913 se cumplió su deseo de morir “para unirse a su Dios, por quien suspiraba”.