Nació en Nursia (Italia) hacia el año 480. Inició sus estudios en Roma, pero antes de finalizarlos decidió retirarse a la soledad y “vivir consigo mismo bajo la mirada de Dios” (S. Gregorio Magno).Comenzó a practicar la vida eremítica en Subiaco, donde reunió a algunos discípulos. Para huir, según parece, de la ira de un presbítero vecino suyo, emigró con algunos discípulos a Montecasino, aproximadamente hacia el 530. Allí escribió la Regla, cuya difusión le valió el título de “Patriarca de Monaquismo Occidental”.
Posteriormente el Papa Pío XII lo llamó “Padre de Europa” y Pablo VI lo declaró “Patrono de Europa”. La tradición monástica celebra su fiesta el 21 de marzo, “transito de San Benito” (año 547). Pero la celebración de la “solemnidad de San Benito” –patrón de Europa (11 de julio)– ha ido tomando mayor realce en detrimento de la celebración del 21 de marzo.