Nació en Pouy (Francia) el 24 de abril de 1580. Pudo cursar los estudios eclesiásticos gracias a los esfuerzos económicos de sus padres. A los 20 años ya es sacerdote. La preocupación de sus primeros años sacerdotales es tener buena posición que le permita vivir cómodamente y ayudar a los suyos. Pero el reproche que le dirigió un mendigo ante su mesa bien surtida le obliga a abrir los ojos: descubre que todo un mundo de pobreza coexiste con el mundo de los ricos. Ya no puede seguir con inquietudes burguesas.
Numerosos eran los pobres de las aldeas que vivían en la ignorancia. Vicente decide reunir a buenas personas y exhortarlas a entregarse a Dios en el servicio de los pobres. Nace la “Asociación de Voluntarias de la Caridad”. El 25 de enero de 1625 funda la Congregación de la Misión (Paúles), sacerdotes dedicados a la evangelización de los pobres.
Ocho años más tarde, en unión con Luisa de Marillac, funda las Hijas de la caridad, cuyo fin es el servicio de los pobres en cualquier parte del mundo. La llama de su entrega permaneció encendida hasta que le llamó el Señor el 27 de septiembre de 1660. Fue canonizado el 16 de junio de 1737. León XIII le declaró patrón de las obras caritativas.
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