Después de casi dos meses y medio, el Instituto Teológico de Vida Religiosa de Madrid concluyó la pasada semana, primera de diciembre, el ciclo de conferencias ‘Los Jueves del ITVR’. Y lo hizo tratando un tema de los más candentes de la vida consagrada, aquel que está llamado a desentrañar la riqueza y la dificultad de la encrucijada que nos plantea la migración, la interculturalidad y la diversidad de los nuevos escenarios humanos, característicos de nuestro siglo y presentes hoy en todas nuestras comunidades.
Para ello fue invitada la profesora Jennifer Gómez Torres, teóloga y conocedora de la realidad de la migración desde el trabajo que viene desarrollando en Cáritas, y que quiso abordar este tema candente a la luz de algunas claves bíblicas. Su conferencia llevaba por título «Entre Babel y Pentecostés. “Un mundo en el que caben muchos mundos”»
«La lectura más común del pasaje de Babel es la de un Dios que castiga», explicó Gómez Torres, a la vez que animaba a desentrañar el texto del Génesis desde otra clave, «la que señala que el ideal no es un proyecto de unicidad, que es lo que se pretendía en la construcción de la torre», sino que «la belleza de la unidad viene de la multiculturalidad». «Y en esta misma estela hemos de ubicar la idea que late en la cita de Pentecostés. «Pues en los Hechos de los Apósteles vemos el paso de la diversidad de lenguas a la unidad de comprensión de la Buena Nueva, que es la instauración del Reino». «En ambos casos, el mismo sueño de Dios», abundó.
‘Un mundo en el que caben muchos mundos’
«“Un mundo en el que caben muchos mundos” significa abrirnos a la posibilidad de ver otros horizontes, y atreverse a ser distintos, a romper la uniformidad y desafiar el pensamiento que nos separa», continuó la experta. «Y en este apartado la vida religiosa tiene una palabra muy importante, porque nace rompiendo las estructuras que nos encorsetan».
Para la teóloga, «el intento de unificación de Babel es un texto muy actual, pues hoy en día se siguen disparando conflictos identitarios, planteando a nuestras sociedades desde una sola visión de identidad». «Así, hoy, pese a vender el ideal de muchas culturas conviviendo entre sí, solo se permite un único sistema económico que levanta muros y militariza fronteras, rechazando de este modo toda posibilidad de enriquecernos mutuamente».
Finalmente, en línea con las últimas campañas de Cáritas, y con la voz del papa Francisco que sobre este tema se ha pronunciado tanto en las Jornadas de Migrantes y Refugiados como en su carta Encíclica Fratelli Tutti, la profesora concluyó advirtiendo de los desafíos que las migraciones entrañan. «El primero, es que no se puede perder de vista la centralidad de la persona; idea que, por desgracia, es totalmente contraria a las campañas de ciertas propuestas políticas, que nos presentan a los migrantes como un problema», lamentó. Del mismo modo, hasta siete puntos más completaron la lista de retos. Entre ellos, «el acompañamiento a las personas en situación de irregularidad, apostar por la hospitalidad, por cohesión social, por la gestión de las fronteras y el diseño urgente de políticas de integración que nos ayuden a gestionar la diversidad, sobre todo en los barrios populares».