PRESENTACIÓN
Daban las 5.00 pm en los relojes y el P. Luis Alberto Gonzalo Díez cmf, daba la bienvenida, con sus palabras nos adentraba “En la escuela de la Palabra”, nos adelantaba que los ponentes nos acercarían a la Palabra desde todos los resortes de la existencia.
Seguidamente se daba paso al momento de oración, animada por el P. Ángel Aparicio cmf desde el Salmo 139, nos recordaba que los salmos son poemas oracionales e invito al auditorio a orar el salmo desde los balbuceos que produce el corazón y los labios al contacto con la Palabra.
5:20 pm: El P. José Cristo Rey cmf, dirigía unas palabras de apertura. Hizo énfasis en que es una semana centrada en la Vida Consagrada como Escuela de la Palabra, donde la Palabra es orada, aprendida y puesta en práctica; invitaba a redescubrir la identidad de los institutos como escuelas, en la escuela del Señor, nos dejaba una pregunta ¿ son nuestros institutos escuelas de aprendizaje? ¿con qué calidad? ¿cómo se da el fracaso escolar? Termino el P. Cristo Rey haciendo referencia a la semana como maqueta de un serio proyecto en nuestros institutos: “escuelas de sueño todavía no cumplidos” y así daba la bienvenida a la escuela.
Monseñor Francisco Cerro, obispo de Coria-Cáceres, encargado de la comisión de vida consagrada, tuvo palabras de elogios a la vida consagrada y recordó que la vida de los consagrados y consagradas ha de ser el Evangelio que la gente leerá, exhortó a la vida consagrada a que siga siendo un Evangelio abierto.
El P. Gonzalo Tejerina , decano de la facultad de Teología de Salamanca nos llevo a meditar en breves instantes sobre lo que la Palabra de Dios trae a la mente: la escucha. La Palabra como revelación de Dios es fenómeno de comunicación, la Palabra fracasa si no tiene en los creyentes la escucha pertinente. ¡Que no fracase Dios en su comunicación! Nos dejaba con esta frase. Estas fueron a grandes rasgos las intervenciones de las personalidades que presidían la mesa presidencial.
EN LA ESCUELA DE LA SABIDURÍA
5:30 pm: Comenzaba la parte académica. La Hna Nuria Calduch-Benages (Misionera de la Sagrada Familia de Nazaret) nos llevaba a la Escuela de la Sabiduría. Nos remontó a los sabios de Egipto y Mesopotamia de donde se inspiró la sabiduría bíblica.
Al centrarse en la sabiduría bíblica y sus libros que datan entre el s. VIII a.C y I d.C detallo su lenguaje exhortativo, de alerta de peligro a los jóvenes, llenos de sabiduría optimista, carácter especulativo y polémico que plantea el problema de Dios.
Según la Hna Nuria, los libros sapienciales coinciden en sus intereses por la sabiduría y muestran al que la busca la vía para encontrarla. Doña Sabiduría se pasea por esas páginas. Otro punto de la ponencia fue centrado en la Sabiduría y Temor del Señor desde una clave sapiencial que busca la sabiduría y busca al Señor, así como la Sabiduría personificada que desde sus diferentes rostros se involucra en un proceso educativo con actitudes constantes y regulares.
La Hna Nuria concluía su ponencia desde “La dimensión sapiencial de la vida religiosa” en cinco puntos abarcadores: 1.- Dimensión humana; 2.- Dimensión formativo-pedagógica; 3.- Dimensión de servicio; 4.- Dimensión religioso ecuménico; 5.- Dimensión de actitud ecológica.
6:40 pm se da el tiempo de receso.
LA ESCUELA DE LA PALABRA
7.00 pm era presentado la segunda ponencia “La Escuela de la Palabra desde la Lectio Divina” por Enzo Bianchi (Prior de Bose).
Bianchi comenzaba diciendo que la Lectio Divina está renaciendo con fuerza impresionante, recordó que el Concilio Vaticano II hizo renacer la práctica de la lectura de la Palabra, recomendándola a todos los fieles. El Concilio coloca la Palabra en el centro de la Iglesia.
Expresaba también que el redescubrimiento de la Lectio Divina es para las comunidades religiosas un momento de gracia, ya que la misma es bálsamo y consuelo en situaciones de envejecimiento y en falta de perspectiva, alimento sólido en el proceso formativo, ocasión propicia para la reforma, vuelve luminoso los rostros humanos que es el que más se parece al rostro de Cristo. El Padre nos hace un regalo en la Escritura para que podamos conocer a su Hijo
Bianchi definía a la Lectio Divina como acontecimiento del Espíritu que introduce al orante en relación profunda filial con el Padre, y subrayaba que el objeto que propone la Lectio Divina es la Sagrada Escritura ya que “la ignorancia de las Escrituras es ignorar a Cristo”.
Afirmaba Bianchi que la Lectio Divina tiene sus resistencias y por eso son necesarios los criterios esenciales que hacen posible la Lectio Divina desde la fe, tales como: conectar con actitud de fe, unidad del texto bíblico, síntesis doxológica, unidad cristológica de las Escrituras, criterio operativo y de contemporaneidad, criterio comunitario y oracional.
Cerraba Bianchi su ponencia diciendo que “sólo practicando la Lectio Divina se recogen sus frutos, de manera especial la fe.”
EN LA ESCUELA DEL SALMO 139
8:15 pm Cerrábamos la jornada ambientados por un salmo y terminábamos rezando: “Condúcenos dulce luz, condúcenos siempre más adelante”.